en aquel corazon impio,
con alas en los pies y trashumante.
Que deja rodar su suerte
echando una moneda al aire,
y no conoce el hastio.
Que de tan irreverente, parece ateo.
Pero si le sale cara o le sale cruz,
igual agradece al Cielo.
Y dice que no es cara
la vida por la que paga.
Y acepta de buena gana,
los clavos de su cruz.
No hay mayor naufragio
que undir las velas en ese mar,
que de tan amargo opaca la retina.
Que tan bien describen los adagios,
que tambien le llaman rutina.
Que el fin del mundo era ayer.
Que mil gurues intentan convencer.
Que sus discursos no son negocios,
que no pretenden hacer dinero,
con su tiempo, hasta el topete ocioso.
¿Que harian los gurues,
si tu fueras completamente feliz?
¿A quien venderian sus palabras?
Envueltas en papel celofan
para que no parezcan vacias,
y de a ratos simulen ser verdad.
¿Que harias tu,
si no te agobiase la rutina?
Tal vez no comprarias auto-ayuda,
ni te confesarias ante el cura.
ni aspirarias cocaina.
No hay mas vida que la que late
en tu corazon, tan revelde, tan impio.
En tus brazos cuando abrazan,
en tus labios cuando besan
y te olvidas del hastio.
-El Farabute-