Tu voz me sonó, a algo tan frío
como una linea hot-line.
A un cartel de "Se Vende"
y se paga al contado
con juegos de azar.
Tu voz me sonó, a esos
versos tran tristes
que dan pena nombrar.
A un final de repente
en su noche de bodas
de dos locos de atar.
Tu voz me sonó, a
veinte años no es nada,
además, que me aclararas
que todo te importa nada,
y para quedarme tranquilo...
porque se te da la gana.
Hay Amores que matan,
los mejores, los mas intensos.
Los que duran poco pero fervientes,
los que no se pueden olvidar.
Los que duran para siempre.
Tu voz me sonó
a canción de despedida.
A esos versos tan tristes,
que aunque rimen, no riman.
-El Farabute-