Escribiendo en gerundio
y con el puño cerrado,
es lo mismo que hablar callando.
O bien podría decirse, que es
dar por terminado el pasado.
Si se escribe en pasado
y mirando por encima del hombro,
es seguir hablando de lo mismo.
Como seguir anclado en los días nublados.
Como seguir respondiendo por costumbre,
juntando herrumbre por instinto.
Escribir en presente, siempre
es tan difícil, como escribir en futuro.
Es como escribir sobre un blanco nieve
que ni se sabe ni se comprende.
Como apostarle al rojo, por si sale en suerte.
Como la verdad del loco, la del que miente.
Tan solo Silencios entre los puntos suspensivos,
entre las pausas de los puntos y comas.
Tan solo sonrisas, entre medio
y después, de un signo de admiración.
Tan solo un Te Amo
sin un antes ni un después,
...entre tú y yo.
-El Farabute-